Uno de los principales problemas a enfrentar en el Manejo Reproductivo Del Hato, es el anestro postparto y con tal finalidad se han recomendado varios protocolos tendientes a inducir la reiniciación de la actividad ovárica, dentro del Período de Espera Voluntario (PEV) para que la hembra quede gestante entre los 60 - 100 días postparto.
Sin embargo, no existe un tratamiento en particular para el anestro postparto que pueda recomendarse inequívocamente para todos los hatos. Cuando se habla de programas de control del celo, es importante discutir con el ganadero los costos y beneficios esperados. Se deben explicar todos los factores y problemas que puedan influir en el resultado. Se debe tener en cuenta que la fertilidad, tanto al celo espontáneo como al celo inducido, varía entre explotaciones.
Hay que planificar todos los aspectos del programa con atención: manejo de los animales, disponibilidad de equipo y productos, nutrición, no vacunar ni desparasitar durante el período de tratamiento y 4 semanas después. Antes de iniciar el programa determinar el porcentaje de animales cíclicos con estructuras funcionales y su condición corporal. Hacer
un seguimiento de detección del celo, aún en programas de IATF
Asegurarse que el semen es de buena calidad y el inseminador tenga la experiencia necesaria y buenos resultados.
El reinicio de la actividad ovárica en el postparto está determinada por la recuperación de la funcionalidad e interacción del eje Hipotálamo - Hipófisis - Ovario, íntimamente relacionada con tres factores principales: 1. Nutrición, reflejada en la condición corporal; 2. Amamantamiento, representado por la presencia del ternero; 3. Alta producción de leche.
Es indudable que una nutrición adecuada en el postparto es la mejor manera de estimular la funcionalidad ovárica. El reinicio de la ciclicidad ovárica está altamente asociada con el balance energético durante este período y el Balance Energético Positivo (BEP) se correlaciona íntimamente con el tiempo a la primera ovulación (BUTLER).
Dentro de las técnicas de amamantamiento restringido se han empleado, el destete temporal, en donde se retira el ternero por una semana, sin que tenga contacto con la madre. Los terneros tendrán alimento suplementario y agua a voluntad. Luego de este tiempo son devueltos a su madre. Igualmente se ha utilizado la placa nasal como técnica de retiro precoz de la cría.
Dentro de las técnicas de amamantamiento restringido se han empleado, el destete temporal, en donde se retira el ternero por una semana, sin que tenga contacto con la madre. Los terneros tendrán alimento suplementario y agua a voluntad. Luego de este tiempo son devueltos a su madre. Igualmente se ha utilizado la placa nasal como técnica de retiro precoz de la cría.
Junto con el mejoramiento de la nutrición se han empleado diferentes métodos para estimular la inducción del celo como los masajes ováricos así como la administración de vitaminas y minerales por vía parenteral o en la sal de consumo, al igual que productos yodados que estimulan por irritación, la actividad ovárica.
En el Grafico 2 se observa el efecto comparativo de la administración rutinaria a los 30 días postparto, de un yodurado y compuestos a base de vitaminas y minerales, PGF2 y combinaciones entre estos productos, apreciándose buenos resultados con el yodurado (VILLARRAGA).Igualmente se han logrado resultados similares con la administración de productos a base de Ca + P, como inductores de celo en el postparto y novillas de vientre que entran en el programa reproductivo.
Al final de la gestación, los esteroides placentarios y ováricos suprimen la liberación de FSH, acumulando esta hormona en la hipófisis anterior y reducen drásticamente los niveles de LH. Luego del parto, hay un aumento de FSH que es seguido por el comienzo de la primera onda folicular (2 a 7 días posparto). Sin embargo, la primera ovulación ocurre más tarde y sólo raramente del folículo dominante de la primera onda folicular. En la mayoría de las vacas, la ovulación ocurre a partir de la segunda a décima onda folicular posparto y si la primera ovulación ocurre después del día 20 es seguida por un ciclo corto. La dominancia folicular fue observada de 10 a 21 días posparto. Trabajos más recientes señalan que es la LH, y no la FSH la hormona limitante para el inicio de la actividad ovárica posparto. Después que los niveles de LH son restablecidos, entre 15 a 30 días posparto, el estado nutricional y el amamantamiento son los factores más importantes que inhiben la ovulación en la vaca. (BO 2005)
Después del restablecimiento de los niveles de LH en la hipófisis anterior, el vínculo madre-cría incrementa el anestro posparto debido al efecto negativo en la liberación de LH, el cual, afectará la maduración final y la ovulación del folículo dominante. El amamantamiento no es el único factor responsable del efecto descrito, también la olfacción, visión, tacto y los estímulos auditivos (entre el ternero y la vaca) pueden conducir al anestro. A medida que continua el período posparto, el efecto negativo del amamantamiento se convierte en menos intenso y las vacas eventualmente ovulan y comienzan a ciclar. El amamantamiento restringido o la separación del ternero, incrementan la frecuencia de pulsos de LH y estimulan el crecimiento folicular y la ovulación en vacas con más de 30 días posparto.
Con esta consideración presente, los tratamientos deben estar dirigidos a aumentar la frecuencia de los pulsos de LH y permitir que los folículos alcancen las etapas finales de maduración.
A partir de 1984, con este fin y luego de disponer de productos hormonales comerciales, se comenzó a aplicar medicamentos a base de GnRH como el "CONCEPTAL" y la "BUSERELINA", como inductores de celo.
La administración de GnRH da lugar a una liberación espontánea de LH y FSH por la pituitaria, en vacas en anestro postparto. Sin embargo, el tratamiento con GnRH no produce una respuesta significativa a LH antes del día 6 postparto, La liberación de LH se relaciona con los niveles de estradiol el cual alcanza su pico aproximadamente al día 10 p.p. La condición previa a la respuesta de GnRH es la presencia de de foíículos, por lo que la respuesta después del tratamiento no se restableció por comlpleto hasta el día 15-16 p.p. ≥ 10 mm, por lo que la respuesta después del tratamiento no se restableció por completo hasta el día 15-16 p.p
En un trabajo en 21 vacas tratadas 18 entraron en celo a los 2-|3 dias, con un promedio de 7.5 días. Los 18 animales ovularon y 13 concibieron (9 al primer celo y 4 al segundo celo). 5 vacas no quedaron preñadas, a pesar de presentarse cambios cíclicos hasta el segundo celo. Las 3 vacas restantes no presentaron síntomas de celo sino hasta 30 días después del tratamiento. (NASR 1984).
Es de anotar teniendo en cuenta las diferentes investigaciones realizadas en la última década, dentro de los protocolos de sincronización e IATF, la acción de la GnRH de inductora de celo, ha sido sustituida por la administración de Estradiol en forma de Valerato o Benzoato.
Actualmente los tratamientos más comúnmente usados para el restablecimiento de la ciclicidad ovárica posparto consisten en la aplicación de dispositivos intravaginales con P4 o implantes auriculares con Norgestomet durante 5 a 10 días. Los dispositivos de liberación de P4 y los implantes mantienen las concentraciones plasmáticas de P4 por el período en que permanecen en el animal. Como las concentraciones de P4 alcanzan niveles subluteales durante el tratamiento, hay un incremento en la frecuencia de pulsos de LH que conducen al crecimiento folicular, el cual previene la atresia del folículo dominante. Este mecanismo posibilita el crecimiento y maduración del folículo dominante capaz de ovular, igual que en animales cíclicos. La P4 liberada por los dispositivos impide la formación de un CL de vida corta. De esta manera, la ovulación precedida por el tratamiento con P4 conduce a la actividad normal del CL y posibilita el comportamiento y mantenimiento de la preñez. Usando implantes Syncro-Mate-B ha sido posible disminuir el intervalo entre parto-primer celo desde 186,8±7,3 días (control) a 145,2±8,5 días (animales tratados), sin comprometer las tasas de concepción (62,5 control vs. 67,7 % tratados) en vacas primíparas cruzadas Bos indicus x Bos taurus. (BO 2006).
Durante la misma época de los años 80 se inició el empleo de las Prostaglandinas como inductores de celo en vacas y novillas anestricas. Es importante tener en cuenta que para que actúe la PGF2α es necesaria la presencia de un CL funcional, entre el día 5 y 17 del ciclo estral.
En la Figura podemos observar que el tratamiento a base de PGF2α es efectivo para la inducción de celo en novillas y vacas anestricas post parto, sin embargo , como también se puede observar, hay una gran variabilidad entre la aplicación de la PGF2α y la presentación del celo, por lo que este protocolo necesita de un eficiente sistema de detección de celos, para obtener buenos resultados en programas de IA a celo detectado. Igualmente y por esta misma razón no se recomienda en programas de IATF, (HUMKE 1981).
A partir de 1984, con este fin y luego de disponer de productos hormonales comerciales, se comenzó a aplicar medicamentos a base de GnRH como el "CONCEPTAL" y la "BUSERELINA", como inductores de celo.
La administración de GnRH da lugar a una liberación espontánea de LH y FSH por la pituitaria, en vacas en anestro postparto. Sin embargo, el tratamiento con GnRH no produce una respuesta significativa a LH antes del día 6 postparto, La liberación de LH se relaciona con los niveles de estradiol el cual alcanza su pico aproximadamente al día 10 p.p. La condición previa a la respuesta de GnRH es la presencia de de foíículos, por lo que la respuesta después del tratamiento no se restableció por comlpleto hasta el día 15-16 p.p. ≥ 10 mm, por lo que la respuesta después del tratamiento no se restableció por completo hasta el día 15-16 p.p
En un trabajo en 21 vacas tratadas 18 entraron en celo a los 2-|3 dias, con un promedio de 7.5 días. Los 18 animales ovularon y 13 concibieron (9 al primer celo y 4 al segundo celo). 5 vacas no quedaron preñadas, a pesar de presentarse cambios cíclicos hasta el segundo celo. Las 3 vacas restantes no presentaron síntomas de celo sino hasta 30 días después del tratamiento. (NASR 1984).
Es de anotar teniendo en cuenta las diferentes investigaciones realizadas en la última década, dentro de los protocolos de sincronización e IATF, la acción de la GnRH de inductora de celo, ha sido sustituida por la administración de Estradiol en forma de Valerato o Benzoato.
Actualmente los tratamientos más comúnmente usados para el restablecimiento de la ciclicidad ovárica posparto consisten en la aplicación de dispositivos intravaginales con P4 o implantes auriculares con Norgestomet durante 5 a 10 días. Los dispositivos de liberación de P4 y los implantes mantienen las concentraciones plasmáticas de P4 por el período en que permanecen en el animal. Como las concentraciones de P4 alcanzan niveles subluteales durante el tratamiento, hay un incremento en la frecuencia de pulsos de LH que conducen al crecimiento folicular, el cual previene la atresia del folículo dominante. Este mecanismo posibilita el crecimiento y maduración del folículo dominante capaz de ovular, igual que en animales cíclicos. La P4 liberada por los dispositivos impide la formación de un CL de vida corta. De esta manera, la ovulación precedida por el tratamiento con P4 conduce a la actividad normal del CL y posibilita el comportamiento y mantenimiento de la preñez. Usando implantes Syncro-Mate-B ha sido posible disminuir el intervalo entre parto-primer celo desde 186,8±7,3 días (control) a 145,2±8,5 días (animales tratados), sin comprometer las tasas de concepción (62,5 control vs. 67,7 % tratados) en vacas primíparas cruzadas Bos indicus x Bos taurus. (BO 2006).
Durante la misma época de los años 80 se inició el empleo de las Prostaglandinas como inductores de celo en vacas y novillas anestricas. Es importante tener en cuenta que para que actúe la PGF2α es necesaria la presencia de un CL funcional, entre el día 5 y 17 del ciclo estral.
BIBLIOGRAFIA
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BO G. CUTAIA L. PINCINATO D. PERESA C. EFECTO DEL CONTENIDO DE PROGESTERONA DE UN
DISPOSITIVO INTRAVAGINAL SOBRE LAS TASAS DE PREÑEZ OBTENIDAS EN VAQUILLONAS
CRUZADAS BOS INDICUS INSEMINADAS A TIEMPO FIJO. CONGRESO MUNDIAL DE
REPRODUCCION EN RUMIANTES NUEVA ZELANDA AGOSTO 2006
BO G. ESPECIALIDAD EN REPRODUCCION BOVINA IRAC 2005
BUTTLER WR, EVERETT RW. COPPOK CE. 1981. THE RELATIONSHIPS BETWEEN ENERGY
BALANCE, MILK PRODUCTION AND OVULATION IN POSTPARTUM HOLSTEIN COWS. J. Anim. Sci
53: 742
COREA A. HERNANDEZ N. INDUCCION DEL CELO EN VACAS EN ANESTRO POSTPARTO MEDIANTE LA ADMINISTRACION DE SALES MINERALES VITAMINAS Y MASAJE OVARICO EN EL MUNICIPIO DE RIOBLANCO MATAGALPA. 2007
HUMKE R. SOBRE LA APLICACION DE ILIREN, ANALOGO DE PGF2α, EN HEMBRAS BOVINAS. LIBRO AZUL 18 HOESCHT. Pag 545-553.
NASR .T; SHARWY S.M; EL-AZAB M; LABIL F.M. INDUCCION DEL ESTRO Y MEJORA DE LA FERTILIDAD EN VACAS Y BUFALAS ANESTRICAS MEDIANTE CONCEPTAL® RECEPTAL®. 1984. EL LIBRO AZUL 21 HOESCHT Pag 748-750
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VILLARRAGA A.C. ESTUDIO COMPARATIVO DE TRES TRATAMIENTOS PARA MEJORAR LA EFICIENCIA REPRODUCTIVA EN EL POSTPARTO EN GANADO DE LECHE EN EL TROPICO. 1990
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